La oratoria es el arte de hablar con elocuencia. Y sea cual sea nuestro trabajo, necesitamos hablar y comunicarnos efectivamente con los demás. El lenguaje es el instrumento por el que se controla la comunicación verbal. Las personas somos lo que expresamos, por lo que hablar con alcance y validez es de gran importancia. Fluidez verbal, elocuencia, concisión, ritmo, tono, el correcto uso de las pausas y obviamente, contenido significativo, son piezas fundamentales para seguir una buena oratoria, impactar en los demás, ofrecer la mejor imagen de uno mismo y, sobretodo, lograr acuerdos mutuamente beneficiosos. La importancia del dominio de esta competencia no se limita solamente al mercado laboral sino también a una habilidad personal que puede desarrollare y que será útil para el desempeño optimo y sano de nuestra red de vínculos y relaciones interpersonales.